La fiebre del mundial. ¿Enemigo número 1 de Venezuela?

Oficialmente se dio inicio este jueves 12 de junio de 2014 al tan esperado Mundial de fútbol . Sin embargo la opinión de los venezolanos se fragmenta en dos vertientes, las cuales se pueden sintetizar en una pregunta sencilla ¿Es el Mundial Brasil 2014 un elemento distractor para el venezolano ante la crisis social y económica que nos atañe hoy por hoy?



    2014, año del tan esperado y tradicional Mundial de fútbol. 2014, año en el que Venezuela ha vivido una serie de acontecimientos serios íntimamente relacionados con la calidad de vida de todos sus habitantes. Como es costumbre, el Mundial atrae la atención de todos, y generalmente los venezolanos no salen de éste paquete. Hasta el 2010 en un país como el nuestro era unísono el clamor por el tan esperado evento deportivo. Sin embargo en este año eso no es así. Las opiniones se han fragmentado en dos . Por una parte encontramos a quienes pueden apreciar los partidos y estar pendientes de la situación del país perfectamente bien, y otros que aseguran que la llegada del Mundial es un elemento que va a distraer al venezolano, y por eso empeorará el panorama. Desde el día jueves he estado observando el comportamiento y leyendo publicaciones referentes a esa coyuntura, y ciertamente tengo mi propio punto de vista, el cual lo comentaré en las siguientes líneas.

     No soy amante del fútbol ya que es un deporte que no llama completamente la atención, pero las celebraciones del Mundial siempre me han parecido hermosas y me han agradado. Esa opinión no ha cambiado, a pesar de que como bien sabemos, Brasil atraviesa de igual forma por una crisis, pero no entraré en esos detalles. Este año ha sido bastante particular, pero eso no ha aplacado mis ganas de disfrutar de los partidos que se celebran allí. Eso sí, ninguno de ellos hará que descuide la realidad del contexto venezolano. Así como yo hay muchos que toman esos noventa minutos para ver algo distinto a la cotidianidad ( si, ya nuestra crisis se convirtió en cotidianidad, lamentablemente) y disfrutarlo. Pero en medio de este panorama de " fiesta no tan fiesta" aparece el grupo que cree que eso está mal, y que quien vea los partidos ya incurriendo en una falta grave. 

     Seré sincera, y como este blog es para compartir con ustedes lo que pienso , mis apreciados lectores, en efecto emitiré mi opinión. Es la postura más absurda  que he podido ver en mucho tiempo. Personalmente no concibo el hecho de que se juzgue  a alguien que quiera dar matices de normalidad a su vida, vida que vale resaltar, se desarrolla en un contexto de total anormalidad. El ver partidos de fútbol no hace a nadie descuidado, y no todo el que se disfraza de la bandera de Venezuela señalando de irresponsable al otro es el ciudadano más responsable del mundo, y mucho menos se lo creo a alguien que comparta esa opinión tan mediocre por las redes sociales . El " aquí tienen su mundial" seguido de una foto de una protesta, o bloquear entradas y forrar paredes con las fotografías de los caídos para tildar de indiferentes a quienes quieren tomarse un tiempo para pensar en otra cosa no cambiará nuestra realidad, así de sencillo. 

     Indiferente es una palabra que se puso muy de moda en el vocablo del pueblo venezolano desde el día 12 de febrero del año en curso, pero a mi me gustaría que quienes la usan con más fuerza en estos días de Mundial me expliquen su consistencia. Adjudicarle a este evento deportivo la culpa de una posible distracción o ceguera de lo que ocurre es un poco soso, un argumento vacuo carente de sentido en el máximo nivel de la expresión. Muchas personas antes del Mundial Brasil 2014 y del 12 de febrero vivían una ceguera permanente, la cual disminuyó, más no acabó, el día anteriormente citado. Antes del tan mencionado 12F, muchas de las personas que hoy "son las más preocupadas" vivían en una burbuja, donde la realidad de los demás no importaba, y tampoco parece importar del todo actualmente. Entonces utilizar el Mundial como excusa para ocultar la irresponsabilidad ciudadana que se ha venido ejerciendo en Venezuela de TODA LA VIDA es sinónimo de cobardía y estupidez. Siento ser tan dura, pero debo aceptar que me molesta ver que en una protesta se utilice como arma una tradición internacional para señalar al otro que probablemente está más preocupado, pero desea tener un momento de paz. 

     Venezuela no cambiará con las críticas, sino con la acción, y esa acción todavía sigue siendo débil. Para poder hablar de respeto debemos comenzar por respetar las decisiones que tomen los demás, siempre y cuando no afecte a nadie. El ver un partido de noventa minutos tampoco hará que el país se incinere. 
¿ Cómo lo vamos a rescatar? el día que se ejerza la ciudadanía de forma correcta, y eso comienza desde un acto simple como el de no tirar la basura en el piso, o mantener una conducta cívica en la calle. ¿ Eso se hace? la respuesta es no. 

     Si usted, estimado lector, es uno de los que piensa de esa manera, le digo con todo respeto : Deje de hacerlo. No genere molestas a los demás, y si quiere llevar un mensaje hágalo, pero de una manera que no irrite al resto. Así ganará más. 

Madeline Rodríguez. 

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